Una niña de 6 años de edad estuvo encadenada por meses en el sector Genovés en Porlamar, estado Nueva Esparta. Los vecinos de la calle San Francisco aprovecharon que los padres estaban en el Hospital Luis Ortega, ya que la madre estaba en trabajo de parto, para investigar qué pasaba con la infante.
Los vecinos relatan que tenían meses sin ver a la niña y siempre que le preguntaban a la madre les decía que estaba viendo televisión. Una vecina un día intento entrar a la casa a verla y la madre corrió a cerrar la puerta.
Esta situación generó incertidumbre. Una vez la madre dio a luz, quedó hospitalizada por tener la hemoglobina baja. Ahí aprovecharon que la casa estaba sola y se acercaron a llamar a la niña.
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Cuando abrieron las ventanas sintieron olores putrefactos y llamaron con insistencia a la infante. Esta salió tambaleando y decía que tenía mucha hambre.
Niña desnutrida en Nueva Esparta
Al ver las condiciones de esta comenzaron a llamar a familiares que residen en un sector vecino. Una tía al verla se escandalizó y llamó a la policía.
En ese momento llegó el padre y lo enfrentaron, este accedió a abrir la puerta. Al ver a la niña la regañó. Pero los familiares entraron y la sacaron de inmediato. PoliMariño fue el primer cuerpo policial en llegar.
La mujer quedó identificada como Carla Valera, de 24 años y su pareja Omar Pérez, de 57, quien es padrastro de la víctima.
La mamá sigue hospitalizada en el hospital Luis Ortega y el hombre está detenido en los calabozos de PoliMariño.
Además, de la niña maltratada tienen otra más pequeña y un varón que recién nació hace dos días.
Los vecinos comentan que Carla Valera tuvo a unos morochos, uno murió a los dos días de nacer y otro tres meses más tarde supuestamente de muerte súbita.
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