A los vecinos de la población de La Guardia les urge que se le haga mantenimiento constante a las quebradas que atraviesan por las diferentes comunidades, ya que lucen con gran cantidad de monte y basura, que generan mosquitos y otros tipos de animales que transmiten enfermedades en el ser humano.
Muestra de esta realidad son las que pasan por las calles Antonio Díaz, Sucre, Bermúdez y Arismendi, específicamente en el sector El Piñonate, resultando esta última la más olvidada por los entes competentes.
Quebradas en La Guardia
Luis Velásquez, habitante de La Guardia, considera que por falta de gobierno se ha llegado al extremo «que las quebradas estén sucias». Cada vez que camina cerca de una de estas se pregunta, «qué tanto puede costarle a la alcaldía el mantenimiento».
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Considera que no es una vez al año o una vez cada cierto tiempo que deben limpiarse, «debería ser frecuentemente porque el monte crece».
Del mismo modo, Soraida Salazar, habitante de La Guardia, comentó que no hay necesidad que el pueblo tenga que estar haciéndole llamados a la alcaldesa Marisel Velázquez para que mande las maquinarias y limpien las quebradas.
«Ese es su deber como autoridad, garantizarnos ese servicio para que la gente pueda vivir en comunidades dignas. La idea no es que sólo espere momentos de elecciones para mover las máquinas y hacer el trabajo», agregó.
Mientras que, Efraín López, muy descontento con la situación, expresó que las quebradas también se prestan para que los delincuentes hagan de la suya. «Imagínate, sino las limpian, se convierten en bocas de lobo y a cualquiera pueden atracar a cualquier hora del día», añadió.
Piensa que, así como las quebradas que requieren mantenimiento, «hay tantas cosas que se deben de hacer en La Guardia».
Los pobladores sostienen que la última vez que la alcaldía envío a un equipo para pasar las máquinas por las quebradas fue entre los meses de octubre y noviembre del año 2021, antes de las elecciones. Incluso aseguran que, en ese momento, quedaron canales pendientes por limpiar, como por ejemplo el del sector El Piñonate, donde los vecinos se sienten burlados por la alcaldesa, quien a finales del año pasado se comprometió ante los medios de comunicación regionales de que enviaría a hacerle mantenimiento completo a la quebrada y no lo hizo.
¿Y dónde dejan la vialidad?
De acuerdo a los habitantes de La Guardia, la carretera de la vía principal «no están muy buena» y le hacen falta arreglos. Resaltan que los autobuses y los vehículos particulares caen en los huecos y que esto contribuye al deterioro de las unidades de transporte público.
Destacan que, hay huecos que han sido tapados con puro relleno de tierra, lo que califican como algo «inaceptable». Piden a gritos al gobernador de Nueva Esparta, Morel Rodríguez Ávila, que meta de lleno a su equipo de gobierno en La Guardia.
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