Autor: Transparencia Venezuela – www.transparencia.org.ve
Durante el gobierno de Hugo Chávez y con más énfasis en el de Nicolás Maduro el poder militar cobró gran relevancia en la vida política y económica de Venezuela al tomar el control casi absoluto de sectores clave para la sociedad. En los últimos años militares activos o retirados asumieron atribuciones que van desde la Vicepresidencia de la República hasta ministerios, embajadas, gobernaciones y alcaldías, incluso hasta la presidencia de empresas estatales que nada tienen que ver con el estamento militar.
De acuerdo con la investigación Empresas Propiedad del Estado fase II que presentó Transparencia Venezuela a finales de 2018, de las 576 compañías estatales al menos 60 cuentan con un militar como máxima autoridad. Los datos, que pueden ser consultados en la plataforma Vendata, muestran que las empresas lideradas por los militares pertenecen a sectores de gran importancia para la economía venezolana y que, además, han recibido significativas sumas de dinero sin que ello se refleje en una mayor eficiencia.
Entre las estatales lideradas por militares destacan los casos de Pdvsa, presidida por el mayor general Manuel Quevedo; Corpoelec, cuyo presidente es el mayor general Luis Motta Domínguez; y Cuspal, con el coronel Vianney Rojas a la cabeza. Las tres empresas muestran un desempeño pobre y han sido foco de múltiples denuncias de corrupción.
Compartir el poder con un grupo de militares le ha permitido al gobierno de Nicolás Maduro contar con el respaldo del estamento aun en momentos de gran conflictividad política y social. Sin embargo, en lo que va de 2019 han surgido pronunciamientos de militares que se han desligado del poder.
Fuente: Boletín No. 73